Lis, es un poco cuadriculada, no le gusta mucho la aventura, probar cosas nuevas.. de hecho siempre ha vivido en la ciudad y no es que no le guste la naturaleza es que le da asco pensar en todo lo que se pueda encontrar en ella.
Un día, por motivos de trabajo tuvo que ir un fin de semana a una casa de campo, no le hacia mu- cha gracia pero ya se había comprometido. Cuando llegó no era como ella se esperaba, era peor. En ningun momento quería quedarse sola y si le rozaba algo de alrededor se volvía loca, tanto, que empezó a sospechar que tenía tripofobia.
Lis no quería continuar así, pensó que una de las formas de poder superar este asco sería afrontarlo. Decidió ir ella sola al invernadero de la casa, con la mala suerte de quedarse encerrada en él. Paso las peores horas de su vida, hasta que por fin sus compañeros se dieron cuenta de que estaba allí.
Es verdad que desde ese día Lis puede afrontar mejor su fobia con la naturaleza, pero no obstante sigue manteniendo la misma cara de asco de siempre cada vez que ve o toca algo que le recuerda a la naturaleza.